Descubre las partes fundamentales de un Templo Griego

partes del templo

Los templos griegos son construcciones emblemáticas de la arquitectura de la antigua Grecia. Su objetivo principal era albergar las imágenes de culto de la religión griega. Estos templos se encontraban en la zona sagrada de las ciudades-estado y se distinguían de la zona civil.

Las partes fundamentales de un templo griego incluyen la naos o cella, el crepidoma, el estilóbato, las columnas y estereóbatos, la planta del templo y la decoración escultórica. A lo largo de la historia, esta arquitectura evolucionó y se desarrollaron distintos estilos, como el dórico, jónico y corintio.

No debemos olvidar el templo monóptero, un tipo de templo griego circular sin cella.

Partes fundamentales de un Templo Griego

Los templos griegos estaban compuestos por diversas partes que constituían su arquitectura distintiva. Estas partes incluían la naos o cella, el crepidoma, el estilóbato, las columnas y estereóbatos, la planta del templo y la decoración escultórica.

En esta sección, exploraremos en detalle cada una de estas partes y su importancia en la estructura y función de los templos griegos.

Naos o Cella: La casa del dios en el templo griego

La naos o cella era considerada la morada del dios al que el templo estaba dedicado.

Era una sala cerrada y solo accesible para los sacerdotes y aquellos encargados del culto. En su interior se encontraba la imagen o estatua de la divinidad a quien se rendía culto.

La naos era el espacio sagrado por excelencia del templo y simbolizaba la presencia divina.

Crepidoma: La plataforma elevada del templo

El crepidoma era la plataforma elevada sobre la cual se levantaban las columnas del templo. Esta base proporcionaba estabilidad y elevación al edificio, creando una impresionante presencia visual. El crepidoma solía estar compuesto por varios escalones, algunos visibles y otros ocultos, dependiendo del diseño y estilo arquitectónico del templo.

Estilóbato: La base del templo griego

El estilóbato era la base sobre la cual descansaba todo el templo griego. Era una superficie plana y horizontal que aseguraba la estabilidad y soporte de la estructura. Sobre el estilóbato se erigían las columnas que caracterizaban el estilo arquitectónico del templo.

Columnas y estereóbatos: Elementos estructurales del templo griego

Las columnas y estereóbatos eran elementos esenciales en la arquitectura de los templos griegos. Las columnas se utilizaban para sostener la estructura y proporcionar un aspecto majestuoso al templo.

partes del templo

Los estereóbatos eran los escalones que conferían altura al edificio y servían como punto de apoyo para las columnas.

Planta del templo: Tipos de distribución de las columnas

La planta del templo se refería a la disposición y distribución de las columnas en el espacio. Dependiendo de la distribución de las columnas, se clasificaban diferentes tipos de planta de templo, como el “in antis” (con columnas entre las paredes laterales del pronaos), el “próstilo” (con columnas solo en el frente), el “anfipróstilo” (con columnas en el frente y la parte trasera) y el “períptero” (con columnas que rodean todo el templo), entre otros.

Decoración escultórica: Frontones y frisos en los templos griegos

La decoración escultórica era una característica distintiva de los templos griegos. Los frontones, que eran triángulos decorativos ubicados en los lados menores de las fachadas, solían estar adornados con esculturas que representaban escenas mitológicas o eventos históricos.

Los frisos, por otro lado, eran bandas esculpidas que decoraban las paredes del templo, añadiendo un elemento artístico y narrativo a la estructura arquitectónica.

Templo griego de orden dórico

Características del orden dórico en los templos griegos

El orden dórico es uno de los estilos arquitectónicos más reconocibles en los templos griegos. Se caracteriza por su sobriedad y solidez, reflejando los ideales de la época clásica.

Algunas de las principales características del orden dórico son:

  • Pórtico sin columnata frontal: A diferencia de otros estilos, el templo de orden dórico no cuenta con una columnata visible en su fachada frontal.

    Se apoya únicamente en una serie de columnas en el perímetro del edificio.

  • Columnas dóricas: Las columnas dóricas presentan un fuste robusto y acanalado, que se estrecha ligeramente hacia arriba. No cuentan con una base visible, sino que reposan directamente sobre el estilóbato.
  • Capitel dórico: El capitel dórico está formado por dos elementos principales: el equino y el ábaco.

    El equino es de forma circular y liso, mientras que el ábaco es una pieza cuadrada y plana que conecta la columna con el entablamento.

  • Entablamento: El entablamento dórico está compuesto por el arquitrabe, una viga lisa y rectangular que descansa sobre las columnas, y el friso, que consiste en una serie de triglifos y metopas.
  • Frontones simples: Los templos dóricos suelen tener frontones triangulares, pero estos son más simples en comparación con otros estilos, con una decoración menos elaborada.

Distintivos del estilo dórico en la arquitectura

El estilo dórico se caracteriza por su apariencia sólida y austera, evocando la belleza y estabilidad de la antigua Grecia.

Algunos de los distintivos más destacados del estilo dórico en la arquitectura son:

  • Simetría y proporción: Los templos dóricos se diseñaban siguiendo una estricta simetría y proporción, creando una sensación de armonía y equilibrio visual.
  • Sobriedad decorativa: A diferencia de otros estilos más ornamentados, el orden dórico se caracteriza por su sencillez y una decoración más minimalista.

    Se buscaba destacar la belleza de las formas arquitectónicas en sí mismas.

  • Uso del mármol: Los templos dóricos solían construirse con materiales de alta calidad, como el mármol, que proporcionaba resistencia y durabilidad a la estructura.
  • Elevación del edificio: Los templos dóricos se elevaban sobre una base escalonada, conocida como crepidoma, que proporcionaba una plataforma sólida y resaltaba la importancia del edificio.
  • Reflejo de los valores griegos: El estilo dórico refleja los valores de la antigua Grecia, como la disciplina, el orden y la búsqueda de la perfección en la arquitectura y las artes.

Templo griego de orden jónico

El orden jónico es uno de los estilos arquitectónicos más conocidos de la antigua Grecia.

templo griego

Se caracteriza por ser más refinado y elegante que el dórico, presentando columnas más esbeltas con fustes acanalados. A continuación, se detallan las características principales y los elementos distintivos de este estilo en la arquitectura de los templos griegos.

Características del orden jónico en los templos griegos

  • Columnas jónicas: Las columnas jónicas tienen una base compuesta por molduras y un fuste acanalado que se estrecha hacia arriba. Su capitel es característico por su forma de volutas.
  • Entablamento: El entablamento jónico presenta un friso decorado con relieves y una cornisa con molduras y dentículos.

    A diferencia del dórico, no cuenta con el trígifo y metopa.

  • Volutas: Las volutas del capitel jónico son la característica más distintiva de este estilo. Estas espirales invertidas agregan un toque de sofisticación y son consideradas símbolos de riqueza y poder.
  • Proporciones equilibradas: El orden jónico se distingue por sus proporciones equilibradas y estilizadas.

    Las columnas son más esbeltas y altas en comparación con el dórico, lo que genera una sensación de ligereza y elegancia en el templo.

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Elementos distintivos del estilo jónico en la arquitectura

Además de las características mencionadas, el estilo jónico también se distingue por elementos específicos en la arquitectura de los templos griegos:

Estatuas femeninas (cariátides):

En algunos templos jónicos, como el Erecteión en Atenas, se utilizaban estatuas femeninas conocidas como cariátides en lugar de columnas en las fachadas.

Estas esculturas cumplen la función estructural de soportar el entablamento y añaden un toque artístico distintivo al templo.

Fachadas con arquitrabado continuo:

En contraste con el estilo dórico, los templos jónicos pueden presentar fachadas con arquitrabado continuo, sin interrupciones ni división en triglifos y metopas. Esto contribuye a crear una apariencia más suave y uniforme en la estructura del templo.

El estilo jónico en la arquitectura de los templos griegos representa la evolución hacia una estética más refinada y ornamental, destacándose por sus columnas esbeltas, capiteles con volutas y frisos decorativos.

Esta variante del orden jónico ha dejado un legado duradero en la arquitectura y ha sido admirado a lo largo de la historia como un exponente de la belleza clásica.

Templo griego de orden corintio

El orden corintio, uno de los tres órdenes arquitectónicos griegos, se caracteriza por su elegancia y ornamentación exuberante.

Aunque menos común que los órdenes dórico y jónico, el orden corintio es reconocido por sus capiteles decorados con hojas de acanto y sus columnas más delgadas y estilizadas. Este estilo arquitectónico se desarrolló en el siglo V a.C.

y alcanzó su apogeo en el periodo helenístico y romano.

Características del orden corintio en los templos griegos

  • Capiteles decorados: El orden corintio se distingue por los capiteles en forma de campana, adornados con hojas de acanto que se entrelazan alrededor de la columna.
  • Columnas estilizadas: Las columnas corintias son más esbeltas y estilizadas que las columnas de los otros órdenes, con fustes estriados que se ensanchan hacia abajo.
  • Entablamento elaborado: El friso del templo corintio está ricamente decorado con esculturas y molduras ornamentales, que incluyen festones y guirnaldas.
  • Mayor ornamentación: A diferencia de los órdenes más sobrios, el estilo corintio se caracteriza por una mayor ornamentación, con detalles esculpidos en todas partes del edificio.

Elementos distintivos del estilo corintio en la arquitectura

  • Volutas en los ángulos: Los capitales corintios están rematados por volutas en los cuatro ángulos, añadiendo un toque de sofisticación al diseño.
  • Abundancia de decoración floral: Las hojas de acanto, motivos florales y guirnaldas se utilizan abundantemente en la ornamentación del templo corintio, creando un efecto visualmente impactante.
  • Detalles escultóricos en las cornisas: Las cornisas corintias suelen estar adornadas con figuras esculpidas y ornamentos detallados, realzando aún más la belleza del templo.
  • Mayor altura en los templos: El orden corintio se asocia con templos más altos y esbeltos, lo que permite una mayor sensación de verticalidad y grandiosidad en la estructura.

Templo monóptero: Un templo griego circular sin cella

El templo monóptero es una variante única dentro de la arquitectura de los templos griegos.

A diferencia de los demás templos, este tipo presenta una forma circular en lugar de rectangular y carece de la tradicional naos o cella en su interior.

En lugar de contar con una estructura cerrada, el templo monóptero se caracteriza por una serie de columnas dispuestas en círculo alrededor de un espacio abierto central.

Esta disposición crea una sensación de amplitud y permite una interacción más directa con el entorno natural.

Una de las ventajas de esta peculiar forma es que los visitantes pueden experimentar una perspectiva panorámica al admirar el paisaje desde el centro del templo.

Además, al no contar con una cella, el enfoque principal se centra en los elementos arquitectónicos exteriores, como las columnas y los frontones, que suelen estar ricamente decorados con esculturas.

El templo monóptero, al igual que otros templos griegos, puede presentar diferentes estilos arquitectónicos, como el dórico, el jónico o el corintio.

Cada uno de estos estilos aporta sus características distintivas, como las proporciones de las columnas y los detalles ornamentales.

Aunque el templo monóptero no es tan común como otras estructuras griegas, varios ejemplos destacados perduran en la actualidad, como el Monumento a Lisícrates en Atenas.

Estos templos circulares sin cella son una prueba más de la diversidad y la creatividad de la arquitectura griega, que trasciende los límites de la estructura rectangular tradicional.

Evolución histórica de los templos griegos

Orígenes y desarrollo en la antigua Grecia

Los templos griegos tuvieron su origen en la antigua Grecia, donde se desarrollaron a lo largo de los siglos.

En sus inicios, los templos eran estructuras sencillas y modestas, con una planta rectangular y techo a dos aguas. Estos primeros templos, de estilo arquitrabado, se inspiraron en las construcciones pre-griegas y minoicas.

Con el tiempo, los templos griegos evolucionaron y se volvieron más elaborados y ornamentados, reflejando el crecimiento cultural y el avance de los conocimientos arquitectónicos. Los griegos introdujeron elementos como las columnas, que se inspiraban en las estructuras egipcias y mesopotámicas.

A lo largo de los siglos VIII y VII a.C., los templos griegos se desarrollaron en tres estilos principales: el dórico, el jónico y el corintio. El estilo dórico se caracterizaba por columnas robustas y sencillas, sin base y con un capitel de formas geométricas.

El estilo jónico, en cambio, presentaba columnas más esbeltas y elegantes, con una base y un capitel decorado con volutas. Finalmente, el estilo corintio, el más tardío, destacaba por sus capiteles adornados con hojas de acanto.

Influencias en la arquitectura posterior

La arquitectura de los templos griegos tuvo un tremendo impacto en la arquitectura posterior, tanto en el mundo antiguo como en la actualidad. Durante el periodo helenístico, los templos griegos se vieron influenciados por la arquitectura oriental, adoptando elementos como columnas con capiteles ricamente adornados y frisos decorativos.

Además, los romanos también se inspiraron en la arquitectura griega, adaptando y adoptando muchos de sus elementos en sus propios edificios. Los templos romanos, aunque con orientaciones y estilos diferentes, incorporaban columnas y elementos decorativos similares a los de los templos griegos.

Incluso en la arquitectura moderna, los templos griegos han sido una fuente de inspiración. Muchos edificios gubernamentales, institucionales y monumentales alrededor del mundo han adoptado elementos clásicos de la arquitectura griega, como columnas y frontones, como símbolo de majestuosidad y autoridad.

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