El titán Cronos, dios griego de la mitología griega

Cronos

Una de las historias más interesantes de la mitología griega es el mito de la sucesión en el que los antiguos griegos pasaban por generaciones de deidades que lucharon por dirigir el mundo y gobernarlo.

Aunque la gran mayoría de las personas están familiarizadas con la generación de los Olímpicos, aquellos dioses titanes que les precedieron realizaron también unas hazañas dignas de la historia.

Lo que es cierto es que no habrían existido nunca si no hubiera sido gracias al titán Cronos. Éste fue el líder de la primera generación de los titanes de la mitología griega que gobernó durante la edad de oro del hombre y preparó el camino para que los Olímpicos pudieran llegar al poder.

Los orígenes de dios titán Cronos según la mitología griega

De los 12 titanes conocidos en la historia de la mitología griega, Cronos, era el más joven de todos ellos, aunque su historia comenzó mucho antes de su nacimiento.

Los padres del dios Cronos eran las deidades primordiales Urano y Gea, aunque existen otras versiones del relato que dicen que Cronos era hijo del titán Océano y su esposa Tetis. Sin embargo, la mayoría de los relatos se refieren a los orígenes de Urano y Gea.

Urano era la personificación del cielo y Gea era la diosa de la tierra y ambas deidades primordiales fueron algunos de los primeros seres que existieron gobernando antes de que los humanos caminaran por la tierra.

Según la Teogonía de Hesíodo, Urano era un dios impulsado por el odio que no permitía que sus hijos prosperaran, y por ello, acabó por encerrarlos, impidiéndoles salir del vientre de Gea.

El nacimiento del titán Cronos y La Caída de Urano

El cansancio y la pena invadieron a Gaia, que suplicó a sus hijos que actuaran para acabar con los deseos egoístas de Urano.

Por ello, el joven titán Cronos fue el único que tomó una decisión para hacer frente a su padre. Gaia creó una hoz adamantina y escondió a su hijo Cronos hasta que llegó el momento. Entonces el titán Cronos escapó del vientre de Gaia y castró a Urano.

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Los testículos castrados del padre de Cronos serían los creadores de otras figuras importantes en la mitología. Se dice que Cronos arrojó los testículos y los dejó rodar en el mar. Allí produjeron una espuma blanca en la que emergió la diosa Afrodita.

Se dice que la sangre que fluyó del padre de Cronos creó bestias y ninfas y cayó a la tierra dando lugar al desarrollo de los Gigantes Meliae y Erinyes.

En cuanto a Urano, su historia prácticamente termina con su castración. El antiguo gobernante del cosmos se desvaneció en la oscuridad y rara vez apareció en los mitos futuros más allá de una breve mención.

Así fue como el titán Cronos liberó a la mayoría de sus hermanos y rápidamente se convirtió en el nuevo gobernante del universo. Los Titanes crecieron en poder y Cronos tomó a su hermana Rea como esposa, convirtiéndose así en las deidades que gobernarían en el mundo.

Representaciones del dios Cronos en la mitología

El titán Cronos no era ampliamente adorado en la Grecia prehelénica y por ello, no tenía templos propios, aunque sí aparecía en diferentes obras de arte.

Normalmente el titán cronos era representado a menudo como un hombre mayor que portaba una guadaña con forma de hoz o una espada con arpa, haciendo así referencia al accesorio con el que castró a su padre. Por tanto, este es el símbolo del Dios Cronos

El gobierno del titán Cronos y Rea

Gracias a las acciones que realizó Cronos para derrotar a su padre, su gobierno fue una época próspera.

Su madre Gaia se liberó de sus cargas y pudo seguir fertilizando la tierra, ayudando así a que crecieran las cosechas que condujeron a un largo período de felicidad para los humanos y los dioses por igual.

Así, el titán Cronos fue el líder de los Titanes durante la Edad de Oro de los humanos, puesto que la inmoralidad era inexistente y no había necesidad de leyes.

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Fue realmente una época de virtud y prosperidad, en la que, gracias a la felicidad de Gaia y los Titanes el mundo floreció. Muchos creen que la conexión de Cronos con la agricultura y las cosechas se debe a su liderazgo durante esta época.

El mito de Cronos devorando a sus hijos

Aunque el gobierno de los Titanes fue pacífico, el tiempo de relativa armonía no duró para siempre. Eventualmente el dios titán Cronos se volvió violento y algo paranoico.

Tras recibir la profecía de que sus hijos lo derrocarían, el titán Cronos comenzó a engullirlos. Su esposa Rea dio a luz a cinco hijos que Cronos se tragó rápidamente para asegurarse de que la profecía no se hiciera realidad.

Rea no estaba contenta con la pérdida de sus hijos, así que acudió a Gea en busca de ayuda y juntas idearon un plan: Cuando quedó embarazada de su sexto hijo, Gea le dijo a Rea que fuera a la isla de Creta para dar a luz en secreto al dios Zeus.

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Rea entonces engañó al titán Cronos dándole una piedra envuelta en pañales para que se la tragara y el titán Cronos devoró la piedra, llamada piedra de Omphalos, sin pensarlo dos veces.

El comienzo de la Titanomaquia y la caída del titán Cronos

Rea escondió a su bebé, el futuro dios Zeus en una cueva del Monte Ida. Quién lo crió varía según los relatos. Algunas historias dicen que una cabra le ayudó a alcanzar la madurez. Otros dicen que una ninfa o incluso la madre Gea lo cuidó.

De cualquier manera, Zeus creció hasta la edad adulta sin que el titán Cronos supiera que existía y cuando estuvo listo, el dios Zeus fue a ver a su padre disfrazado de copero.

Le dio a Cronos una bebida emética hecha por Metis, que, al beberla, hizo que el titan vomitase a los niños que había tragado: los que se convertirían en los futuros dioses olímpicos.

Después de que Zeus huyera con sus hermanos, los olímpicos y los titanes entraron en guerra.

La Titanomaquia fue una guerra de 10 años entre las dos generaciones de deidades, en la que finalmente los dioses Olímpicos acabaron ganando, al emplear su arma secreta: los hermanos prisioneros del titán Cronos.

Zeus liberó a los cíclopes y a las bestias Hecatónquiros y estos ayudaron a los olímpicos lanzando piedras a los Titanes mientras el dios Zeus desataba una tormenta de rayos.

Así pues, la maniobra tuvo éxito y los Titanes finalmente cayeron, haciendo que los olímpicos subieron al monte que acabaría llevando su nombre y pasaran a gobernar el mundo

El destino del titán Cronos

Es cierto que en la mitología hay diferentes versiones sobre lo que le terminó ocurriendo la Cronos.

En la gran mayoría de las historias, el dios Cronos y los Titanes fueron encarcelados y desterrados a las profundidades del Tártaro, dónde fueron torturados por los olímpicos que gobernaban.

En algunos poemas órficos, el dios titán Cronos pasó su tiempo encarcelado en la cueva de Nyx.

Otros relatos afirman que Cronos escapó al Lacio o que terminó siendo castrado por Zeus al igual que su padre antes que él.

El tiempo que Cronos fue castigado es objeto de debate. O bien sufrió en el Tártaro durante toda la eternidad, o bien fue perdonado por Zeus. En este último caso, los mitógrafos dicen que Zeus perdonó a su padre después de muchas generaciones humanas.

Entonces nombró al dios titán Cronos gobernante de la Isla de los Bienaventurados, una isla que era una representación del cielo reservada para las almas de los héroes.

El papel de Cronos como dios romano en la mitología romana

En la mitología romana Cronos era conocido como Saturno y aunque las historias son similares en las dos mitologías, los romanos veían a Saturno de forma mucho más positiva.

No era el dios cruel que era para los antiguos griegos. En su lugar, era simplemente una figura intermediaria entre los Titanes y los Olímpicos.

Para los romanos, Saturno fue el que acabó con el dominio de los Titanes al tomar su poder y por esta razón, el titan Cronos romano desempeñó un papel más importante en la mitología romana.

Se crearon muchos templos en su honor y se celebraron festivales para festejarlo. De hecho, la popular Saturnalia era una de las fiestas más importantes para los antiguos romanos.

Otras historias del Dios Cronos en la mitología

La historia del nacimiento de Cronos y su posterior caída durante la Titanomaquia es la más comúnmente contada.

Sin embargo, el titán Cronos también se menciona en otras historias como la de la creación de Quirón, un centauro muy sabio que aparece en la mitología griega.

En esta leyenda, el titán Cronos intentó engañar a su esposa y hermana Rea con una ninfa del monte Pelion. Pero durante la cita con esta, apareció Rea y los interrumpió.

Así pues, se dice que el titán Cronos se transformó en un caballo para escapar, surgiendo así Quirón, mitad hombre mitad caballo. Otros supuestos hijos de esta unión son Dolops y Aphrus.

Quirón acabó desempeñando un papel importante en la mitología griega, interactuando con varias figuras clave. Fue un renombrado maestro que enseñó a algunos de los más grandes héroes de la antigua Grecia, como Jasón, Perseo, Aquiles e incluso Hércules.

Cronos fue el más joven de los 12 titanes, convirtiéndose más tarde en el rey de los titanes, y sus hermanos fueron: Oceano, Hiperión, Iapeto, Tetis, Rea, Temis, Crius, Mnemosyne, Febe, Theia y Coeus, además de ser el hermano de los tres cíclopes y de los tres Hecatónquiros nacidos de Urano y Gea.

 

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